TRAS EL PÚBLICO
RECONOCIMIENTO DE LA RECUPERACIÓN DE SU FE
Aparecen estigmas de santidad en las manos
de Gabino de Lorenzo
ü División de opinión
entre los expertos
ü El PP regional aprovecha
el suceso para hacer proselitismo entre
los militantes y simpatizantes de Foro Asturias
MERKEL-TREFE
OVIEDO.- Estigma ¿Señal de santidad o trastorno mental?
Los estigmas son señales o marcas que aparecen en el cuerpo de algunas
personas, casi siempre devotas cristianas.
Estas heridas son similares a las heridas infligidas sobre Jesús durante
su crucifixión según la iconografía cristiana
tradicional; así, muchos estigmatizados suelen tener marcas en las palmas de
las manos. Las diversas confesiones cristianas consideran que pueden ser
de origen sobrenatural, bien un don de Dios o
una intervención diabólica, o causadas por el mismo sujeto que las porta, ya sea
intencionalmente o por razones de origen psicosomático (la persona en
cuestión es tan religiosa que su cuerpo espontáneamente desarrolla heridas
parecidas a los estigmas, como reacción a sus procesos mentales).
Esta última posibilidad parece ser la que informa el caso del
delegado del Gobierno, con llagas en las manos que han ido apareciendo, según
ha podido conocer este medio, desde el momento en que aceptaba el pasado mes de
enero la responsabilidad de pregonar la Semana Santa de Oviedo; con la
celebración el 14 de los corrientes de un acto en un club del diario “La Nueva
Escaspa”, D. Gabino realizó tan sinceras,
emotivas y sentidas manifestaciones de renovación de su fe -«hace diez años
vivía instalado en una cierta tibieza espiritual. Estaba bastante alejado de la
práctica religiosa. No era una oveja descarriada, pero no formaba parte
plenamente del rebaño»-, que los estigmas no pudieron por menos que crecer
hasta hacerse apreciables a simple vista para el asombro de propios y extraños.
Otras informaciones, como la caía en éxtasis o supuestas
visiones místicas del ex alcalde, no han podido en cambio ser confirmadas,
aunque se multiplican los testimonios anónimos de ovetenses que dicen haber
visto, de madrugada y visiblemente embriagada, a una fantasmal figura que
ataviada con una bata femenina de boatiné, quizás reformada asemejando una
casulla, deambula por las noches del casco antiguo profiriendo exabruptos y
admoniciones de índole religiosa.
A falta de confirmación oficial por la jerarquía católica, suponemos
condicionada por la buena amistad que mutuamente se profesan D. Gabino y el arzobispo
de Oviedo, recurrimos a nuestro experto habitual en estas lides, el Padre Clemente
de La Quina, sacerdote y master en exorcismos y presencias demoníacas por la
Universidad de La Felguera, quien nos vaticinó que la sacra condición de las
llagas del delegado podría confirmarse, si no en la misma Semana Santa de este
año, el próximo día de La Ascensión o en su defecto durante la celebración del Corpus
Christi, cuando D. Gabino podría levitar, girar la cabeza 360º o algo por el
estilo. Quién sabe.
Mucho más ágil ha resultado la reacción del PP regional con su
presidenta Mercedes Fernández a la cabeza, quien ya se ha pronunciado,
claramente y sin fisuras, en el sentido de acometer una nueva campaña de
proselitismo entre militantes y simpatizantes de Foro Asturias, a fin de promover
el regreso a su partido de las personas
que, por sus mayores o más firmes convicciones religiosas, pudieran ahora
participar del gozo de D. Gabino en el clima de efervescencia religiosa asimismo
propiciado por el acceso a la Cátedra de Pedro del nuevo Papa Francisco I. A
tal fin se programa, a fecha por concretar, un mitin espectáculo de los que
gusta el PP, con participación estelar del delegado y otros dirigentes
populares, música re-mix del grupo Parálisis Permanente (“Quiero ser santa””) y
acaso algún milagro de D. Gabino, si está de humor, como levantar la visera del
Calatrava o algo así, depende.
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